Resumen
El déjà vu, del francés «ya visto», es una experiencia transitoria en la cual un individuo tiene la sensación subjetiva de haber vivido una situación actual en el pasado, pese a saber racionalmente que esto no es posible. Este fenómeno ha sido objeto de fascinación tanto en la cultura popular como en la investigación científica. A lo largo del tiempo, ha sido interpretado desde la espiritualidad, la filosofía y la psicopatología. Sin embargo, en las últimas décadas, las neurociencias han ofrecido explicaciones más fundamentadas sobre su origen, vinculándolo a procesos de la memoria, errores de codificación y disfunciones temporales del cerebro, particularmente en el lóbulo temporal medial. Este artículo revisa la literatura científica sobre el déjà vu desde un enfoque neuropsicológico y clínico, abordando sus causas, mecanismos neurobiológicos y su relación con trastornos neurológicos como la epilepsia del lóbulo temporal.
Introducción
Todos, en algún momento de nuestras vidas, hemos experimentado una desconcertante sensación de familiaridad frente a una situación completamente nueva. Este fenómeno, conocido como déjà vu, ha sido reportado por al menos el 60-70% de la población general (Brown, 2004). Aunque breve y, por lo general, inocuo, el déjà vu despierta preguntas profundas sobre la percepción, la memoria y la conciencia. Desde la psicología clínica, su análisis es relevante no solo por su carácter intrigante, sino también porque su aparición frecuente puede estar asociada a ciertas condiciones neurológicas, como la epilepsia del lóbulo temporal (Illman, Butler, Souchay & Moulin, 2012).
Este artículo se propone ofrecer una revisión integral y comprensible del déjà vu desde el campo de las neurociencias, enfocándose en su fisiopatología, los mecanismos de la memoria implicados, su relación con trastornos neurológicos y su significado clínico.
El déjà vu: definición y características fenomenológicas
El término déjà vu fue introducido por Émile Boirac en 1876 para describir la experiencia de familiaridad sin reconocimiento (Boirac, 1918). Se trata de una ilusión de la memoria que se manifiesta como una convicción subjetiva de que una situación presente ha sido vivida anteriormente, aunque se sepa con certeza que no es así. El fenómeno es efímero, difícil de predecir o reproducir, y suele ir acompañado de cierta extrañeza o confusión.
Entre sus características más frecuentes, se incluyen:
- Sensación súbita de familiaridad sin motivo aparente.
- Convicción racional de que es imposible haber vivido previamente la situación.
- Duración breve (segundos).
- Incapacidad para precisar cuándo o dónde ocurrió la experiencia «previa».
Prevalencia y factores asociados
Diversos estudios indican que entre el 60% y el 80% de las personas sanas han experimentado al menos un episodio de déjà vu en sus vidas (Brown, 2004; Sno & Linszen, 1990). Es más común en personas jóvenes, particularmente entre los 15 y 25 años, y tiende a disminuir con la edad. Algunos factores asociados incluyen:
- Fatiga o estrés.
- Sueño insuficiente.
- Altos niveles de distracción o ansiedad.
- Consumo de ciertas sustancias (como marihuana, que puede aumentar la frecuencia del déjà vu en algunos individuos).
También se ha documentado una mayor incidencia del fenómeno en personas con alta escolaridad y con estilos cognitivos introspectivos (Neppe, 1983).
Déjà vu y memoria: ¿Una falla del sistema?
Las explicaciones neuropsicológicas más aceptadas apuntan a que el déjà vu surge por un «desfase» entre los sistemas de memoria implícita y explícita, o por errores de codificación en el hipocampo.
Según la teoría de la dualidad de los procesos de memoria (Tulving, 1985), la memoria episódica nos permite recordar eventos específicos en tiempo y espacio, mientras que la memoria de familiaridad (asociada al córtex perirrinal) permite reconocer estímulos sin recordar el contexto exacto. El déjà vu podría producirse cuando se activa inapropiadamente un juicio de familiaridad sin recuperación del episodio concreto.
Otra teoría sostiene que el déjà vu es el resultado de una disfunción momentánea del circuito del hipocampo y el lóbulo temporal medial, regiones críticas en la consolidación y evocación de memorias (Eichenbaum, 2000). Una activación parcial o errónea del hipocampo podría hacer que un estímulo actual se etiquete falsamente como un recuerdo antiguo.
Neuroanatomía del déjà vu
Los estudios con neuroimagen funcional y registros intracraneales han identificado las siguientes regiones implicadas:
- Hipocampo: clave en la codificación y recuperación de la memoria episódica.
- Corteza perirrinal: asociada con la sensación de familiaridad.
- Amígdala: influye en la valoración emocional de los recuerdos.
- Corteza entorrinal y parahipocampal: median la conexión entre estímulos sensoriales y memoria.
Cuando se produce un fallo en la sincronía entre estas áreas, especialmente durante la codificación inicial de una experiencia, es posible que el cerebro «marque» incorrectamente una situación como ya vivida.
Déjà vu y epilepsia del lóbulo temporal
El vínculo más robusto entre el déjà vu y la neurología se encuentra en los pacientes con epilepsia del lóbulo temporal (ELT). En estos casos, el déjà vu puede preceder a una crisis epiléptica, actuando como un aura sensorial.
En este contexto, el fenómeno deja de ser benigno y se convierte en un síntoma clínico. Estudios con electroencefalografía intracraneal han demostrado que una descarga epiléptica en el lóbulo temporal medial puede inducir sensaciones vívidas de familiaridad, a menudo acompañadas de distorsiones perceptivas, ansiedad o despersonalización (Bartolomei et al., 2004).
Este tipo de déjà vu suele ser más intenso, más frecuente y más perturbador que el experimentado por personas sanas.
Estudios con neuroimagen
Las técnicas de neuroimagen, como la resonancia magnética funcional (fMRI) y la tomografía por emisión de positrones (PET), han permitido observar qué regiones cerebrales se activan durante experiencias similares al déjà vu. En algunos estudios se ha logrado inducir sensaciones de familiaridad mediante estimulación eléctrica directa en el lóbulo temporal medial, especialmente en el giro hipocampal (Bancaud et al., 1994).
Además, experimentos con realidad virtual han mostrado que ciertos patrones espaciales similares pueden generar sensaciones engañosas de reconocimiento, sugiriendo que la memoria espacial también puede estar involucrada (Cleary et al., 2012).
Explicaciones alternativas: procesamiento dual y atención fragmentaria
Otra hipótesis relevante es la del procesamiento dual, que plantea que el cerebro procesa la información sensorial por dos rutas paralelas (e.g., visual y auditiva), y si una de estas rutas se retrasa ligeramente, la percepción duplicada puede inducir una sensación de familiaridad (Spatt, 2002).
Asimismo, el modelo de atención fragmentaria (Brown, 2003) sugiere que un estímulo parcialmente percibido de forma inconsciente puede facilitar la sensación de familiaridad cuando luego se presenta en su totalidad, como si ya lo hubiéramos visto antes.
Perspectiva clínica: ¿cuándo preocuparse?
Aunque el déjà vu en la mayoría de los casos es benigno y pasajero, hay situaciones en que su análisis clínico se vuelve necesario:
- Alta frecuencia o intensidad: cuando ocurre varias veces al día o de manera muy vívida.
- Asociación con síntomas neurológicos: como pérdida de conciencia, alucinaciones o movimientos involuntarios.
- Historia personal de epilepsia: el déjà vu puede ser un indicador de crisis parciales simples.
- Alteración funcional significativa: si interfiere con la vida diaria o genera ansiedad persistente.
En estos casos, se recomienda una evaluación neurológica completa, incluyendo resonancia magnética cerebral y electroencefalograma (EEG).
Implicancias para la psicología clínica
Desde la psicología clínica, comprender el fenómeno del déjà vu es importante por varias razones:
- Diferenciación de síntomas psiquiátricos: en algunos trastornos como el trastorno disociativo o ciertos cuadros psicóticos, las experiencias de irrealidad o de familiaridad alterada pueden confundirse con el déjà vu.
- Educación psicoeducativa: muchas personas se preocupan por estos episodios, temiendo que sean señales de un trastorno grave. Una explicación clara y científica puede reducir la ansiedad asociada.
- Refuerzo de la alianza terapéutica: abordar estas experiencias subjetivas favorece la validación emocional del paciente.
Conclusión
El fenómeno del déjà vu continúa siendo un campo fascinante y aún parcialmente misterioso dentro de las neurociencias. Las investigaciones más recientes apuntan a su origen en procesos de memoria episódica y a una disfunción temporal transitoria en estructuras como el hipocampo y la corteza perirrinal. Aunque en la mayoría de los casos es un fenómeno benigno, su aparición frecuente o intensa puede estar asociada a condiciones neurológicas como la epilepsia del lóbulo temporal.
Desde la psicología clínica, es fundamental distinguir entre un déjà vu fisiológico y uno patológico, aportando contención, información clara y una mirada comprensiva a quienes consultan por esta experiencia. Comprender el déjà vu nos permite asomarnos al funcionamiento íntimo de la memoria, la percepción y la conciencia, y nos recuerda lo frágil y fascinante que puede ser nuestra experiencia subjetiva del tiempo.
Referencias
Bancaud, J., Brunet-Bourgin, F., Chauvel, P., & Halgren, E. (1994). Anatomical origin of déjà vu and vivid ‘memories’ in human temporal lobe epilepsy. Brain, 117(1), 71-90. https://doi.org/10.1093/brain/117.1.71
Bartolomei, F., Lagarde, S., Blanc, F., & Bénar, C. (2004). Epileptic déjà-vu: Clinical, electrophysiologic, and neuroimaging correlates. Epilepsia, 45(10), 1275–1282.
Boirac, É. (1918). L’Avenir des Sciences Psychiques. Paris: Alcan.
Brown, A. S. (2003). A review of the déjà vu experience. Psychological Bulletin, 129(3), 394–413. https://doi.org/10.1037/0033-2909.129.3.394
Brown, A. S. (2004). The Déjà Vu Experience: Essays in Cognitive Psychology. Psychology Press.
Cleary, A. M., Ryals, A. J., & Nomi, J. S. (2012). Can déjà vu result from similarity to a prior experience? Supporting evidence from the Deese–Roediger–McDermott (DRM) paradigm. Journal of Memory and Language, 67(3), 354–365.
Eichenbaum, H. (2000). A cortical–hippocampal system for declarative memory. Nature Reviews Neuroscience, 1(1), 41–50. https://doi.org/10.1038/35036213
Illman, N. A., Butler, C. R., Souchay, C., & Moulin, C. J. A. (2012). Déjà experiences in temporal lobe epilepsy. Epilepsy Research, 99(3), 247–259.
Neppe, V. M. (1983). The psychology of déjà vu: Have I been here before? Johannesburg: Witwatersrand University Press.
Sno, H. N., & Linszen, D. H. (1990). The déjà vu experience: Remembrance of things past? American Journal of Psychiatry, 147(12), 1587–1595.
Spatt, J. (2002). Déjà vu: Possible parahippocampal mechanisms. Journal of Neuropsychiatry and Clinical Neurosciences, 14(1), 6–10.
Tulving, E. (1985). Memory and consciousness. Canadian Psychology, 26(1), 1–12.


